delirio

delirando entre humo de tabaco y tu sombra
entre tu cuerpo enigmático y vacías rimas
entre canciones muertas y lágrimas

vagando entre heridas y cicatrices,
por los días que estás y los que no volverás
mientras que en tu espera me vuelvo cenizas,
naciendo manantiales de absurdos y raciocinios
entre agujeros negros; dulces abismos de recuerdos.

delirando... sobreviviendo en estos pequeños confesores de otoño
rasgando la punta más gastada de la eternidad y tu ausencia.
llenando el hoyo más profano y profundo; el amor,
donde se oculta la locura, donde arde el corazón

delirando, viajando en las entrañas de tus auroras boreales
perdiéndome en tus  matinales mas profundos, extasiándome
en el renacer, obscuro futuro, ardiente presente de tu blasfema, sublime sonrisa

penetrantes delirios como el dolor son tentar mi deseo y mi orgullo,
quimeras que solo en mi completa realidad se igualan a todo y nada
y en esos dolorosos sollozos...
invades la calma, ¿cómo poseerte esas diez veces sin ser demonio?.

taciturnos delirios son ya este ignoto final,
yacen sacrificados en el caótico alba de tu intento de amar,
cual eros torturado negando su virtud,
eres mi ángel insaciado, negando el bello paraíso de nuestra destrucción.