LA ESPERANZA DE UN MAÑANA

Las bombas caen.
Las paredes crujen.
Los pisos se levantan.
Comprimo tu mano
entre las mías
y me aferro
a la esperanza de un mañana.

Echo una mirada
al precario refugio
en el que estamos.
Solo puedo ver:
Colchones encimados.
Un montón de frazadas.
Niños llorando.
Madres desesperadas
y el parpadeo de una lámpara
a kerosene
agonizando.

La noche
está oscura...cerrada...
luces de colores
irrumpen el cielo
cayendo sobre los techos
como cascadas.

Me abrazo fuertemente a ti
y en tu campera azul
oculto mi cara:
Nada temo...
Nada espero
tu estás aquí
y eso me basta.

Absortos los ojos.
Ensalzada el alma..
Procuro hallar una explicación
a tanta locura humana.
Más en mi desconcierto
compruebo
que estoy equivocada:

Allí fuera...
la guerra sigue.
Allí fuera...
los hombres se matan.

La sangre de un inocente
ha teñido de rojo
los campos minados
y de su boca
un grito de libertad
se escapa..
de tanto en tanto.

Un frio intenso
se apodera de mi cuerpo
la muerte
ha comenzado su ronda:
cruel...despiadada...
silenciosa....

Quién será el siguiente?

Una lágrima moja
las mejillas encendidas
y me abrazo más a ti
para no perderte.

                                                                       CYNTIAMILLI SANTILLAN